domingo, 30 de janeiro de 2011

El “regalo” de Monsanto a Haití. Una breve historia de violencia.

Ryan Stock , para Sin Permiso
 
Déjalo arder
"Un gran regalo de pascua" comentó Elizabeth Vancil, directora de Monsanto de iniciativas de desarrollo. Casi 60.000 sacos de semillas híbridas de maíz y otros vegetales fueron donados por Monsanto a Haití post-terremoto. En observancia del Día Mundial del Ambiente, 4 de Junio 2010, cerca de 10.000 granjeros rurales haitianos se congregaron en Papaye para marchar siete kilómetros hasta Hinche para celebrar este regalo. Al llegar, tomaron sus canastas de pascua con más de 400 toneladas de vegetales y las quemaron. [i] "¡Larga vida a la semilla nativa de maíz!" cantaron al unísono. "¡El OGM [organismo genéticamente modificado] de Monsanto viola la agricultura campesina!"
De acuerdo con Chavannes Jean-Baptiste, coordinador del Movimiento Campesino de Papay (MCP) "actualmente hay una escasez de semilla de maíz en Haití ya que muchas familias utilizaron las suyas para alimentar refugiados"[ii] Como cualquier corporación capitalista de desastres, Monsanto le tendió una mano en un momento de crisis al 65 por ciento de la población que sobrevive a base de agricultura de subsistencia. Pero no tendieron cualquier mano, más bien ofrecieron un puñado de semillas. Este puñado de semillas de maíz, el cultivo tradicional de Haití, estaba tratado con el fungicida Maxim XO. Con la misma benevolencia, no regalaron cualquier semilla de tomate, regalaron semillas tratadas con Thiram, un químico tan tóxico que la EPA (Environmental Protection Agency, Agencia de Protección Ambiental)  ha decidido que es demasiado tóxico para uso casero y ordenado que cualquier trabajador agrícola que lo utilice debe usar ropa protectora. [iii] ¡Felices Pascuas! El sitio web oficial de Monsanto explica este donativo tóxico de la siguiente manera: "los tratamientos fungicidas para semillas se aplican con frecuencia a las semillas antes de ser sembradas para prevenir enfermedades relacionadas con hongos que surgen en el suelo y limitan la capacidad de la planta para germinar y crecer. El tratamiento también previene ciertas enfermedades que pueden ser contraídas en la transferencia entre países."[iv] Sin embargo, de acuerdo con la Hoja de Datos sobre Substancias Departamento de Salud y Servicios para la Tercera Edad de Nueva Jersey "la exposición repetida [al Thiram] puede afectar riñones, hígado y la tiroides. Exposición prolongada o en altas dosis puede dañar los nervios".[v] ¿Por qué Monsanto estaba tan ansiosa de donar semillas que podían comprometer la salud de tanta gente hambrienta? "El gobierno haitiano está utilizando el terremoto para venderle el país a las multinacionales" dijo Jean-Baptiste. Bienvenidos al nuevo terremoto.
"Es un fuerte ataque contra la pequeña agricultura, contra los campesinos, contra la bio-diversidad, contra las semillas criollas... Y lo que queda del ambiente en Haití."- Chavannes Jean-Baptiste, director ejecutivo del MCP.


Una breve historia de violencia
Monsanto también es responsable de otras invenciones alteradoras de vidas,  como el favorito de todos, el agente naranja. El gobierno vietnamita dice que este agente mató o dejó con discapacidad a 400.000 vietnamitas y que 500.000 niños nacieron con defectos debido a la exposición a este químico.[vi] Hasta el 2000, Monsanto era el principal fabricante de aspartame, el cual, según concluyeron investigadores en Europa "podría tener efectos carcinogénicos." En una rara demostración de justicia social, en el 2005 Monsanto fue encontrada culpable por el gobierno de Estados Unidos de sobornar a altos mandos de Indonesia para legalizar el algodón genéticamente modificado. Un año antes en Brasil, Monsanto vendió una granja a un senador por un tercio de su valor a cambio de su trabajo por legalizar el glyphosate, el herbicida de mayor uso en el mundo.[vii] En Colombia, Monsanto recibió 25 millones de dólares del gobierno de Estados Unidos por proveer su herbicida de marca, Roundup Ultra, en la fumigación anti-drogas del Plan Colombia. Roundup Ultra es una forma altamente concentrada del glyphosate de Monsanto, con ingredientes adicionales para incrementar su potencia. Comunidades colombianas y organizaciones de derechos humanos acusan que el herbicida destruyó cosechas, fuentes de agua y áreas protegidas, y que ha llevado a un aumento en el número de defectos de nacimiento y cáncer.
Con más de 117 mil millones en ventas en el 2009 y más de 650 patentes de biotecnología -en su mayoría relacionadas con algodón, maíz y soja- Monsanto es un poder económico. Nueve de cada diez semillas de soja en Estados Unidos están relacionadas con Monsanto. Junto con Syngenta, Dupont y Bayer, Monsanto controla la mitad de las semillas del mundo con ningún tipo de regulación confiable. Monsanto, una de las compañías más poderosas del mundo, se unió a United Parcel Service para entregar los más de 60.000 sacos de semillas híbridas a sus destinos en la Pascua del 2010 en su movida para gotear un poco de beneficios a la persona común. Distribuir las semillas de Monsanto fue una operación de $127 millones financiado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), llamado "Ganador", diseñado para promover "intensificación agrícola."[viii] De acuerdo con Monsanto, la decisión original para donar las semillas fue tomada en el World Economic Forum en Davos, Suiza,[ix] sin conocimiento por parte de Haití.


"Sin químicos, la vida misma sería imposible." Es el antiguo lema de Monsanto.
Las semillas modificadas genéticamente como aquellas que fueron donadas y posteriormente inmoladas no pueden ser guardadas entre años. Algunas semillas llamadas "semillas terminator" están modificadas para no producir semillas después de la cosecha y requieren que el granjero compre semillas de Monsanto el año siguiente, como parte de un acuerdo legal, en lugar de recolectar las semillas que naturalmente se habrían producido sin las modificaciones genéticas. Otras semillas modificadas que sí producen semillas no pueden ser sembradas de acuerdo a un contrato. Menos resultados, problemas de salud y prospectos debilitados para comprar las semillas de la próxima temporada en consecuencia de y combinada con el acuerdo legal con Monstanto han llevado a muchos granjeros campesinos a la pobreza y ha llevado a una racha subsecuente de suicidios de granjeros en la India. Desde 1997 más de 182,936 granjeros de la India se han suicidado, de acuerdo con un estudio reciente del National Crime Records Bureau.[x] "Conforme se previene el guardado de semillas por patentes y la creación de semillas no renovable, las semillas deben ser compradas por campesinos pobres para cada temporada. Un recurso que antes era gratuito se convierte en una comodidad que debe ser comprada cada año. Este aumento en la pobreza lleva a las deudas. Conforme las deudas aumentan y se tornan imposibles de pagar, los granjeros se ven hostigados a vender riñones o cometer suicidio" apuntó la Autora Hindú Vadana Shiva en su artículo del 2004 "The Suicide Economy Of Corporate Globalisation."[xi]
Los granjeros extranjeros no son los únicos afectados por estas características en los productos y las prácticas de negocios asociadas. Hasta el 2007, Monstanto había presentado 112 demandas contra granjeros estadounidenses por supuestas violaciones de tecnología de contrato en patentes de OGMs, involucrando a 372 granjeros y 49 pequeños negocios agrícolas en 27 estados. De ahí. Monsanto ganó más de $21,5 millones en juicios. En estimados basados en los propios documentos de Monsanto y en reportes de los medios, la corporación multinacional parece investigar a 500 granjeros al año.[xii] "Granjeros han sido demandados después de que su campo fue contaminado por polen o semillas de la cosecha genéticamente modificada de alguien más [o] cuando cuando semillas genéticamente modificadas de la cosecha anterior han germinado o "voluntariado" en campos donde se encontraban sembradas semillas no modificadas al año siguiente," dijeron Adrew Kimbrell y Joseph Mendelson del Center for Food Safety.[xiii] Una semilla de Monsanto frecuentemente aparece de manera mágica en un campo orgánico ordinario, dando a Monsanto pie para una costosa demanda que eventualmente llevará a la ocupación de la granja inocente. 


Nada nuevo bajo el Sol del Caribe
Jean-Robert Estimé, quien fue Ministro de Asuntos Extranjeros durante la sangrientas dictaduras de Duvalier, es el representante de Monsanto en Haití,[xiv] y se reúsa a admitir su participación en empobrecer aún más a su gente. Sin embargo las intenciones "Destino Manifiesto" de Monsanto respecto a Haití no son nada nuevo. Muchos haitianos consideran los donativos de semillas de Monsanto parte de una estrategia económica e imperialista de Estados Unidos. El sector agrícola de Haití ya fue destruido una vez por la intervención de Estados Unidos. Jean Bertrande Aristide perdió el poder en un golpe de estado apoyado por el gobierno estadounidense en 1991. El banco mundial y el fondo monetario internacional decidieron que si regresase al poder, una condición a su llegada sería abrir el país al libre mercado. Poco después, los impuestos sobre el arroz cayó de 35% a 3%y el dinero reservado para desarrollo agrícola se destinó a pagar la deuda externa del país. Bajo la Casa Blanca de Clinton, el mercado Haitiano fue inundado por arroz subsidiado de Arkansas. Desde entonces, casi todo el arroz de Haití es importado y subsecuente, mucha de la experiencia local sobre como cultivar arroz se ha perdido.[xv]


Soberanía alimenticia, no esclavitud agrícola
Conforme el nuevo terremoto continua su movimiento, la aparentemente benévola donación de semillas vegetales cambiará por siempre el paradigma de la agricultura en Haití y llevará a una mayor dependencia de semillas que envenenan el suelo en el que crecen y los cuerpos que las consumen y que crean una dependencia financiera en la firma de biotecnología Monsanto. "Nuestra gente nunca será autónoma si Haití debe sufrir algo que se hace llamar generosidad pero que nos hace dependientes del control corporativo en la producción agrícola." dijo Catherin Thélémaque de Action SOS Haití en Montreal.[xvi] Los agroecologistas Ivette Perfecto y John Vandermeer, de la Universidad de Michigan, recientemente publicaron un estudio que muestra que la agricultura sustentable a pequeña escala es mejor que la agricultura industrial en preservar y aumentar la biodiversidad y los bosques.[xvii] Con menos del 1% de sus bosques originarios aún en pie, Haití no puede apostar con los desastrosos efectos ambientales de los monocultivos industriales para alimentar a su población hambrienta. "Si el gobierno estadounidense realmente quiere ayudar a Haití, debe ayudar a los Haitianos a crear una soberanía alimenticia y agricultura sustentable, basada en sus semillas nativas y con acceso a tierra y créditos. Esa es la forma de ayudad a Haití," dijo Dena Hoff, una granjera orgánica diversificada en Montana y miembro del Comité Internacional de Coordinación de Vía Campesina.


La tormenta que se avecina  

En su historia de la colonización europea de 1780, Guillame Raynal apuntó que habían señales de "una tormenta venidera"[xviii] Esta tormenta explotó en forma de monzón el 22 de agosto de 1791, cuando Dutty Boukman hizo sonar la concha de mar y los esclavos de Saint Dominique se levantaron en revuelta contra los imperialistas franceses. Bajo el liderazgo de Touissant L'Overture y Jean-Jacques Dessalines, los esclavos rebeldes derrocaron a la ocupación imperialista de Napoleón Bonaparte y en 1804, Haití fue declarado como una república libre. Para no olvidar las lecciones de la historia, no podemos ignorar el poder de la unidad. Como Napoleón, una compañía tiránica como Monsanto exporta pobreza, mantendría a la gente como esclavos agrícolas y debe ser resistida. Es hora de que Boukman de nuevo haga sonar su concha: La liberté ou la mort!

Notas:

i. Bell, Beverly. "Haitian farmers commit to burning Monsanto hybrid seed." Huffington Post, 17 mayo, 2010.
ii. La Via Campesina, "Haitian peasants march against Monsanto Company for food and seed sovereignty," 16 de junio,2010.
iii. Extension Toxicology Network, Pesticide Information Project of the Cooperative Extension Offices of Cornell University, Michigan State University, Oregon State University and University of California at Davis.
iv. Veihman, Mica. "Five Answers on Monsanto's Haiti Seed Donation," Beyond the Rows, 20 de mayo, 2010.
v. New Jersey Department of Health and Senior Services. "Hazardous Substance Fact Sheet."
vi. MSNBC, "Study Finds Link Between Agent Orange, Cancer," 23 de enero, 2004, The Globe and Mail, "Last Ghost of the Vietnam War," 12 de junio, 2008.
vii. Kenfield, Isabella, "Monsanto's seed of corruption in Brazil." North American Congress on Latin America, 16 de octubre, 2010.
viii. PR Newswire. "Monsanto Company Donates Conventional Maizeand Vegetable Seed to Haitian Farmers to Help Address Food Security Needs,"  13 Mayo, 2010.
ix. Monsanto Company, "Monsanto donates maizeand vegetable seed to Haiti." Monsanto Blog,13 mayo, 2010.
x. Shiva, Vandana, "The Suicide Economy Of Corporate Globalisation." ZNet, 19 de febrero, 2004.
xi. Chopra, Anuj, "Debt drives farmers to suicide." The National, 20 de enero, 2009.
xii. Center for Food Safety, "Monsanto vs. US Farmers," Noviembre. 2007.
xiii. Andrew Kimbrell and Joseph Mendelson, "Monsanto vs. US Farmers," Center for Food Safety, 2005.
xiv. Urfie, Fr. Jean-Yves, "A new earthquake hits Haiti: Monsanto's deadly gift of 475 tons of genetically-modified seed to Haitian farmers." Global Research. Canada. 11 de mayo, 2010.
xv. Holt-Gimenez, Eric. "Haiti: roots of liberty, roots of disaster." Huffington Post,  21 de enero 2010.
xvi. Organic Consumers Association. "Canadian Groups Support Haitian Rejection of Monsanto's Seed Donation," 3 de junio, 2010.
xvii. University of Michigan. "SNRE Professor Perfecto co-authors PNAS paper on family farms, biodiversity and food production." Ann Arbor, Michigan, 22 de febrero, 2010.
xviii. Center and Hunt, "Liberty, Equality and Fraternity," 119.


Ryan Stock escribe en Truth-out
Traducción parawww.sinpermiso.info: Pablo Yanes Thomas

 
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